El estudio de los eventos extremos: sequías e inundaciones
Las inundaciones y las sequías son fenómenos que año con año afectan a miles de personas en nuestro país. Investigadores universitarios se han dedicado a estudiar las dinámicas de estos fenómenos.
Por Yassir Zárate Mendez –
El doctor Ramón Domínguez Mora es un investigador que se confiesa “100% puma”, luego de haberse formado en las aulas de esta institución desde el nivel bachillerato y hasta el doctorado, pasando por la carrera en ingeniería civil y la maestría.
Ahora forma parte del cuerpo académico del Instituto de Ingeniería (II), donde ha transcurrido prácticamente toda su vida profesional, salvo un breve periodo en el servicio público. Especializado en ingeniería hidráulica, sus líneas de investigación se centran en la hidrología de superficie, particularmente en “la estimación de avenidas de diseño, modelos lluvia escurrimiento y la operación óptima de embalses”.
En su página del II, destaca que el objetivo de los estudios que realiza es el de “resolver problemas prácticos que no pueden ser bien abordados con la ingeniería tradicional”.
Colaboración continental
Domínguez Mora fue invitado por la doctora Blanca Jiménez, también investigadora del II y vinculada con el análisis de los recursos hídricos en México, a colaborar en la redacción de un reporte relacionado con eventos extremos, particularmente sequías e inundaciones.
El texto fue incluido en el libro Diagnóstico del agua en las Américas –cuya reseña se incluye en este número de El faro–. El volumen reúne trabajos de expertos de Canadá, Argentina, Bolivia, Brasil, República Dominicana, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Nica-ragua, Perú, Venezuela y una colaboración residual de investigadores estadounidenses.
En su conjunto, se trata de “una buena recopilación de toda la problemática del agua a nivel continental”, puntualiza el doctor Domínguez, siendo el abastecimiento del líquido a las poblaciones y la calidad del agua los ejes temáticos del estudio.
Eventos extremos
La participación de Domínguez se apoya en información que maneja el Centro Nacional de Prevención de Desastres, y que se remonta a los años 50 del siglo XX.
El artículo indica que esta dependencia “analiza el impacto socioeconómico de los fenómenos geológicos, hidrometeorológicos, químicos y sanitarios”, siendo su misión la de emitir recomendaciones para hacer frente a los embates de la naturaleza o a percances ocasionados por la actividad humana.
“En nuestra labor intentamos una descripción histórica de los datos”, precisa el especialista, quien añade que “una de las metas del estudio ha sido documentar estos eventos”, con el fin de tener un panorama amplio de los daños que causan.
Domínguez admite que la información acopiada en la primera mitad del siglo pasado es relativamente fragmentaria, lo que se convirtió en el principal obstáculo de la investigación.
“La evaluación de los daños que produce una sequía no es fácil y no está bien documentada”, acepta el experto, quien, en contraste, resalta que en el caso de las inundaciones, se tiene información muy precisa, que incluso se vuelve abundante a partir de los años noventa de la pasada centuria.
Datos recopilados
De la investigación se desprende que el municipio mexicano con mayor número de declaratorias de desastre es Guadalupe, Nuevo León, con 14 (1.6 al año), “a pesar de estar ubicado en una zona de baja precipitación anual”.
Por otra parte, “la mayoría de las declaratorias de desastre en México han sido por ciclones tropicales (40%); le siguen las lluvias (33%), y en tercer lugar están las sequías (21%)”, que son precisamente los eventos en los que se focaliza la aportación hecha por el doctor Domínguez Mora. El resto de las declaratorias se debe a bajas temperaturas, tornados, nevadas, heladas o granizadas.
A manera de conclusión, el investigador del II recomienda que se mantenga la documentación de estos fenómenos, para mejorar la prevención y anticipar los posibles daños que originan las inundaciones y las sequías, que al año siguen provocando pérdidas millonarias y numerosas muertes.
